Después de unos cuantos días sin actualizar (estar pachuchilla es lo que tiene, no te sientes con ganas de hacer nada en particular), aprovecho un descansito en la clase de hoy para escribir contaros algo.
La historia se remonta al pasado Salón del Manga de Barcelona donde, un amable Sengoku regaló a una ilusionadísima Shinku un llavero de su personaje homónimo. Sin embargo, ya de vuelta a casa, perdí mi preciado tesoro y, tras deprimirme bastante, traté de buscar otro similar, aunque sin éxito alguno.
Imaginaos entonces cuál sería mi sorpresa cuando, una buena amiga, me regaló, hace apenas unos días, uno idéntico.
Aquí os muestro algunas imágenes del que se ha convertido en uno de mis más preciados tesoros.
2 comentarios:
Ves como al final todo acaba bien? =)
Sí, supongo que tienes razón. ^~^
Aun así, el disgusto no me lo quita nadie.
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